¿Qué comprar y cómo?

Las principales recomendaciones para las personas que desean mejorar sus finanzas personales, siempre empiezan por llevar una revisión de sus gastos para poder identificar gastos innecesarios.

En la práctica, ésta es la parte más difícil de controlar, pues es muy fácil desviarse y caer en tentaciones que nos hacen adquirir bienes o artículos que no estábamos buscando o simplemente que no nos hacen falta.

Hoy en día las estrategias de mercadeo y ventas de los comercios han evolucionado y se han vuelto cada vez más sofisticadas, de manera que han logrado entender la psicología de los consumidores para incentivarnos a la compra de sus productos. Por ejemplo, una técnica muy aplicada es colocar productos o accesorios complementarios –en especial de bajo costo– en la caja de pago; así como en los departamentos de caballeros ha resultado exitoso colocar accesorios de damas, ya que seguramente un caballero irá acompañado de una dama para realizar sus compras, entre otras. Todas estas estrategias, aunque no necesariamente son negativas, tienden a llevar a las personas a adquirir bienes que no estaban buscando inicialmente.

Por esta razón, es importante aumentar el nivel de disciplina y planificación para tratar en la medida de lo posible evitar hacer compras innecesarias. Para ello puedes tomar algunas de las siguientes recomendaciones básicas que te permitirán realizar compras inteligentes de cara a mejorar tu presupuesto personal.

  • En primer lugar, define tus prioridades, a la hora de salir de compras, ten claro lo que te hace falta adquirir y el grado de importancia de cada uno de los ítems.
  • No dejes las compras al azar, en la medida de lo posible, realiza un sencillo plan de compras, el cual puede ser simplemente una lista por la que te vas regir. Funciona en especial para las compras corrientes como las del automercado, o por ejemplo, si debes renovar tu vestuario de trabajo, anota lo que realmente necesitas. Intenta escapar del dicho popular “voy a ver que consigo”, ya que seguramente gastarás más de la cuenta.
  • Busca referencias antes de salir a comprar, evita salir sin tener alguna idea de los precios de lo que vas a adquirir; una sugerencia es buscar los costos de los productos en internet o hacer una llamada telefónica a alguna tienda.
  • Elabora un presupuesto, es importante definir la cantidad de dinero que vas a gastar. La idea de este punto es que tengas predeterminado un límite del monto que vas a dedicar a tu compra.
  • Aprovecha las ofertas, para ello identifica los períodos tradicionales de descuentos, como principio de año o mitad de año. Si sales de vacaciones al exterior, puedes coordinarlas o planificarlas con algunos periodos de ofertas, como los cambios de temporada o la conocida semana de rebajas de acción de gracias en Estados Unidos.
  • No vayas al centro comercial si estas triste, estudios han demostrado que las personas con algún nivel de tristeza o depresión, son más propensos a gastar más de la cuenta en un producto o servicio, creyendo que los hará sentir mejor, pero terminan afectando sus finanzas personales.
  • Planifica tus compras para el corto-mediano plazo, en especial cuando existen niveles de inflación elevada, es importante que identifiques los artículos o productos necesarios que en un corto período tendrás que adquirir. Por ejemplo, si tu vehículo necesitará en 4 meses un cambio de neumáticos, puedes adquirirlos con anterioridad para que de esta forma mantengas tu poder de compra.
  • No te dejes llevar por las marcas, si bien es muy importante adquirir productos de buena calidad para que tengan una vida útil prolongada, trata de analizar el mercado y diferentes productos para conseguir una relación precio calidad que cumpla con tus expectativas.
  • Compra en función de tus necesidades y estilo de vida, para ello identifica tus hábitos de consumo, una persona que camina o hace ejercicio dos veces al mes, no necesita unos zapatos de última generación que usan deportistas de alta competencia; de igual forma, en compras tecnológicas es común ver personas que adquieren equipos con mayor capacidad de lo que necesitan. Por ejemplo, un estudiante cuya necesidad es el uso básico de herramientas de presentación, texto, hojas de cálculo e Internet; generalmente termina por comprarse una computadora profesional sobredimensionada.
  • No dejes que la inflación sea una justificación, muchas personas tienden a confundir el gasto con inversión, pensando que están adquiriendo activos simplemente porque tienden a subir de precio. Pero esto no debe confundirte, un electrodoméstico para tu uso cotidiano, por más que el precio se incremente en el tiempo por efectos inflacionarios, no debe ser considerado una inversión.

Las compras inteligentes sólo requieren de sentido común y algo de planificación, esperamos que puedas dedicar la mayor parte de tu presupuesto para compras que realmente necesites, y logres hacerlo un hábito, esto impactará positivamente tus finanzas personales y tu calidad de vida.

Fuente: http://www.instituto-finanzas.com

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